Standstill mejor acompañados que nunca con la Bonaparte Ensemble

Standstill (Foto: Montse Martín)

La banda capitaneada por Enric Montefusco sigue presentando en directo su último trabajo de estudio, Adelante Bonaparte, un trío de discos que se reúnen bajo un mismo concepto. Probablemente conceptual es la palabra que más define la obra de Standstill. Y precisamente el concepto que han ideado con su nuevo álbum se ha explotado, maximizado y llevado al límite con su aclamado Rooom.

Pero hoy queremos hablar de otra propuesta del grupo catalán. Y es que Rooom tiene una ventaja que puede tornarse desventaja según se mire: es un espectáculo que sólo contiene canciones de Adelante Bonaparte, que si bien ha sido un disco muy bien recibido por crítica y público, puede parecer insuficiente encima de un escenario. Así que Standstill llevan de nuevo canciones de todos sus tiempos a pie del escenario, para deleitar a su público más fiel. Y que mejor que hacerlo acompañado de los mejores, sacando la artilleria pesada para impresionar al personal, con la Bonaparte Ensemble.

Autumn Comets (Foto: Montse Martín)

El pasado viernes fue la noche que el Palau de la Música Catalana vivió con magia un concierto espectacular a todas luces. Fue precedido por los noveles Autumn Comets, grupo que nos llamó especialmente la atención por su relación estilística y profesional con Micah P.Hinson. Pero el público esperaba el poder de Standstill encima de ese enigmático y poderoso escenario. Ante ese demoledor miedo escénico que aparece en un sitio tan emblemático.

Todos de pie dio el pistoletazo de salida a un concierto intenso, sobretodo en emociones. El respetuoso público no empezó a animarse hasta Adelante Bonaparte II, un himno que era inevitable corear al son de Enric Montefusco. Hasta ese entonces, ninguno de los allí presentes tuvo el valor de romper el silencio de la sala, motivado por la fascinación con la que escuchábamos unas canciones que sonaban mejor que nunca. Sobretodo, por el rotundo cuarteto de cuerda o las percusiones protagonizadas por un más que ilusionado Pau Vallvé. Ver sus caras de felicidad ante esos majestuosos focos fue el punto determinante para crear y mantener la magia durante toda la noche. Y es que los juegos de luces hicieron brillar más que nunca el Palau (algo que el público agradece y los fotógrafos salvan de la mejor manera que saben).

Uno de los momentos más emocionantes del concierto fueron los primeros acordes y las primeras palabras que sonaron de Cuando ella toca el piano. Enric Montefusco más emocionado y agradecido que nunca, destacó por su versátil voz. Estaba pletórico, tanto que le jugó una mala pasada en el dificilísimo Porque no me llamas a estas horas. Pero se lo perdonamos, ahí ya se lo perdonábamos todo, rendidos a su energía. 

Standstill (Foto: Montse Martín)

Los bises arrancaron con una reversionada (destripada y remozada completamente) What Thruth?, que puso al público en pie. Algo que se volvió a repetir al acabar el concierto, con todo el público ya coreando sin pudor Adelante Bonaparte I, sabiendo que habían sido partícipes de una noche perfecta. 

Una experiencia muy distinta a Rooom, en la que Standstill volvió a apostar por un directo desnudo y cara a cara con el público, pero mejor acompañados que nunca de un espectacular juego de luces y una banda que muchos esperamos ver de nuevo reunida encima de un escenario. 

Standstill (Foto: Montse Martín)