sábado, 8 de enero de 2011

Entrevista a Belén Arjona y a Virginia Maestro: "La fórmula de OT se ha agotado, es difícil que alguien te garantice con antelación que grabarás un disco"

Nuestras entrevistadas de hoy, en concierto en el Ciclo Vivas

Esta noche el ciclo en acústico Vivas trae en concierto a tres valores musicales de nuestro país. Distintas vertientes del pop se conjuntan esta noche bajo el mandato de Rebeca Jiménez, Belén Arjona y Virginia Maestro, las protagonistas de la noche. Para hablar de este proyecto, pero también de muchas más cosas, tuve el honor de hablar con Belén y Virginia. Dos mujeres luchadoras que tienen muchas cosas en común: Muy pronto sacan un nuevo proyecto discográfico, y con distinto nombre al habitual. ¿Riesgo? Vamos a verlo.


Por Sem Pons,


Belén Arjona y John Lanigan, en su nuevo proyecto Bel and the Boy
Más información en su página oficial de Facebook

Entrevista con BELÉN ARJONA:


Empezamos con lo que os trae aquí a Barcelona, el ciclo Vivas. ¿Como nace este proyecto y como os unís a él?

Conocemos a Vanesa García, la promotora del ciclo, que ya se ha hecho en Madrid. Y hemos empezado a moverlo por distintas ciudades, y ella nos dijo sí queríamos participar. Mujeres al poder.

En Madrid sí hay un circuito de música en acústico en lugares como el Búho Real, pero es difícil encontrar esta cultura en otras ciudades. ¿Intentáis externalizar esta costumbre a otros sitios del país?

Belén: Estaría genial, hoy en día el formato con banda es más complicado de llevar. Antes había presupuestos más ajustables para pagar a los músicos, hoy en día te ves más solo y quieres seguir tocando en directo y llegar a tu público. El formato acústico te da esa posibilidad, y también tener una carrera más dinámica. Acercarte a más lugares de toda España, a gente que te sigue, sin tener que llevar a toda la banda al completo. Aunque eso fuera en muchas ocasiones lo ideal.

Otro de los puntos en común que tenéis Virginia y tú es que en las últimas semanas hemos ido viendo vuestros nuevos proyectos musicales. En concreto, tú has decidido montar un dúo con John Lanigan, el guitarrista que te ha acompañado en directo en los últimos años, un proyecto que se llama Bel and the Boy, con letras en inglés y un cambio de registro. ¿Como nace este proyecto?

Nace de una forma natural, llevamos casi cinco años conociéndonos, tocando juntos. Si trabajas a diario acaba surgiendo. Nuestra relación al trabajar es en inglés. Yo llevo muchos años componiendo en inglés, pero las circunstancias me han llevado a cantar en castellano. Cuando fiché por la primera compañía discográfica tenía todas las canciones en inglés y tuve que traducirlas al castellano. Es una forma natural, los dos teníamos ganas de hacer un disco en inglés. Que pudiéramos expresar y componer los dos. Un proyecto conjunto. Quien nos ha venido a ver en directo verá que tampoco difiere mucho de lo que veníamos haciendo, de las versiones que íbamos tocando, de esos artistas... Estoy más contenta que nunca, creo que está quedando el mejor disco, hasta el momento, de mi carrera. 

¿No es arriesgado dejar una discográfica, todo el proyecto aparte y lanzaros a lo vuestro? ¿No es arriesgado justo en este momento?

Ahora mismo nada es arriesgado, tomar un riesgo ya no es un riesgo. Las compañías están acojonadas, no apuestan por nadie. Sólo sobre seguro. La gente cada vez va a más conciertos, nosotros vivimos más del directo que de vender discos. Así que teníamos que hacer lo que queríamos hacer. Nos fuimos de la discográfica porque en la que estábamos la absorbió una más grande. No tenemos mucho interés en que ahora sea una discográfica española, y si lo es no queremos que sea una grande. Queremos una discográfica pequeña, centrar y mimar el disco. Queremos algo internacional o europeo, por lo menos. Tenemos las miras puestas en Alemania o Reino Unido.

Intentar ser lo más internacional posible.

Esa es nuestra idea, luego que surja o no... (risas). 

¿Es porqué no funciona la música en inglés en España?

Cada vez funciona más, funciona todo. Lo único que pinchan en la radio son artistas internacionales. Todos escuchamos música en inglés, siempre habrá gente más reacia. Lo importante no es el idioma, es que te guste la expresión, disfrutar de lo que esa persona te intenta contar. Ya haremos traducciones para aquellos que quieran entenderlo, que siempre me han escuchado y que le apetece escuchar en inglés y que no tiene la opción de entenderlo.

¿Dejamos de lado el proyecto de 7 horas?

Sí, eso fue un punto y aparte en nuestra carrera. Surgimos y no pudimos llevarnos bien entre nosotros, y no fue hacia adelante. La verdad es que tampoco era muy sincero con respecto a lo que queríamos en ese momento. Lo mejor es hacer lo que uno quiere y ser sincero con uno mismo. Perderemos a gente por el camino, pero ganaremos a otra nueva digo yo.

¿Dónde quedan las canciones que hicisteis con 7 horas?

Ahí se quedaron, en el disco. En el limbo. No me importaría si las rescata otro artista. Nunca se sabe. Por ahora no creo que las toquemos ni las cantemos en ningún sitio. Un acuerdo que hicimos entre nosotros tres, y ahí se quedó.

2011 con nuevo proyecto para Virginia Maestro también
Entrevista con Virginia Maestro:

Hablábamos con Belén de sus nuevas canciones, esta vez en inglés, y nos hemos enterado que tú también vas a incluir varias canciones en inglés en tu nuevo disco. ¿Cómo surge esta idea del inglés?

Desde muy pequeña lo que he vivido ha sido en inglés, por los vinilos de mis padres. Música de fuera, siempre he escuchado música en inglés. Tendencia natural a componer en inglés. El primer disco fue en castellano, y quería meter también cosas mías. Todo el segundo disco lo he compuesto yo, y he querido añadir temas en inglés, me lo he peleado, y a la compañía le gustó mucho y yo también estoy muy contenta.

Es un nuevo proyecto que sorprende porque ya no están ni Risto Mejide ni los Pinker Tones, y los rumores van saliendo acerca de cual será tu nombre artístico. Si va a ser Labuat, Virginia Maestro...

Ya te lo soluciono rápido, el nombre va a ser Virginia Labuat. Seguimos con Labuat porque el primer proyecto se llamaba así, y añadimos Virginia porque soy yo quien estoy al frente del proyecto. Los temas los he compuesto yo, me he metido a co-producir, no he dejado nada al azar ni en manos de otra persona cualquier detalle que atañe al disco. He estado pendiente desde las maquetas hasta las fotografías del disco, o el videoclip. En el estudio con los músicos tampoco he querido perder detalle.

¿No ha sido difícil agarrar tu carrera y decir lo voy a hacer yo, estando en el momento en el que estamos y además siendo la ganadora de Operación Triunfo?

No era muy fácil la verdad. Al venir de donde vengo tienes una pegatina pegada en la espalda que hace que la gente tenga muchos prejuicios. Nadie dijo que fuera fácil. Yo a los primeros meses de mi disco era una niña chica en medio de la Gran Vía, muy perdida. Pero aquello que tuve toda la vida en mi que me ha empujado a querer cantar y componer, y a defender esta idea. Mi máxima es la que me ha hecho hacer un disco, hacerlo mío y hacerlo con la gente que quiero hacerlo y lo voy a defender donde haga falta. Con lo cabezota que soy esto se está materializando y en el futuro haré todo lo que esté en mi mano para que siga así.

Operación Triunfo empieza en pocos días la octava edición.

¿Ah sí? No lo sabía.

Sí, y esta vez se ha confirmado que el premio no va a ser grabar un disco para el ganador, sino un seguimiento a nivel publicitario. Incluso el último ganador del concurso aún no ha sacado disco a la venta. ¿La fórmula de OT se ha agotado?

Imagino que sí, más que nada porque es la octava ya. No solo por ser OT, es que ahora es muy difícil que hoy en día alguien te garantice con tanta antelación que vas a grabar un disco. Una discográfica si no tiene pruebas evidentes de que aquello va a funcionar o que el proyecto musical tenga un peso muy fuerte y les enamore musicalmente o les sorprenda, y que caiga por su propio peso que hay que cogerlo, pues será muy difícil que te cojan. No se venden discos, es muy complicado, cada vez más. No solo crisis, la piratería hace que lo tengamos muy complicado. Las discográficas son empresas, empresas que invierten dinero pensando en que lo van a recuperar, y a día de hoy solo lo pueden prever con artistas que llevan muchos años y que ya han estado vendiendo. Por eso OT está agotado, por eso y porque lleva muchos años.

OT te dio la oportunidad de cantar ante más de cuatro millones de personas semanalmente, pero también a llorar ante toda esa gente en algunas galas. ¿Te compensó esa total falta de intimidad ante el hecho de poder cantar para tanta gente?

Sí, al final sí. Cuando yo me presenté al casting solo tenía en la cabeza: Quiero un contrato discográfico que avale una carrera, vivir de esto, tener un público. En ese sentido claro que fue muy bueno para mi. También he de decir que nunca he cantado peor que en ese programa. Los nervios, la situación personal que tuve ahí dentro. El simple hecho de estar incomunicado ya afecta, y si encima estás incomunicado en esa pompa que es la academia, pues se te complica más. Me afecta mucho emocionalmente cualquier cosa al cantar, y si estoy mal se me va a notar. Y si estoy muy nerviosa y quiero salir corriendo de ahí, se va a notar. Y es lo que me solía suceder en las galas, quería salir corriendo ahí. Por otro lado luego decía "no, no, me voy a quedar y quiero mi disco".

Tal vez sin quererlo te convertiste en el juguete de Telecinco, fue una edición muy polémica, Risto te defendía por un lado y por otro tus compañeros no lo aceptaban. ¿El reality show es lo que hace perder credibilidad al programa?

La credibilidad del programa está complicada, no es un programa de música, es un reality. Yo sólo vi la primera edición, y de como se vendió al público la primera a como se vendió la mía hay un abismo, entre una y otra. No deja de ser un reality y te quita cualquier credibilidad como músico. No tienes libertad ninguna para escoger canciones, a no ser que te nominen, y yo lo estuve varias veces. Y aunque puedas elegir la canción, no puedes elegir ni siquiera como moverte, ni si va a ser música en directo, ni puedes elegir un tema tuyo. Al no haber libertad artística acabas muy encorsetado, y eso le quita credibilidad a todo aquel que quiera ser natural. Es esa pegatina que llevo pegada en la espalda, y que estoy intentando quitarme. Espero que este segundo disco me ayude a hacerlo. 

¿Mantienes el contacto con alguien del programa?

Con alguno de los compañeros. Con Pablo, el segundo finalista, que tiene un local en Fuengirola que se llama 47LiveCafé, nos contrató para hacer un concierto ahí. Es muy majo, nos llamamos y nos contamos como va todo. También con Manu Castellano o Tania, la chica de Barcelona. Francamente con nadie más.

¿No te da la sensación de estar vetada en Telecinco? En los últimos años poco ha salido tu nombre por ahí.

No me siento vetada, en el caso de que lo estuviera tampoco me molesta. El año que saqué el disco, fui a los programas que pude ir y era coherente cantar. Fui a OT, fui a Ana Rosa (risas) que nos permitieron hacerlo en directo. Y tampoco hay muchos más programas donde puedas cantar. Y tampoco me interesa ir a un programa y no cantar. Si estoy vetada tampoco me hiere. No me molesta en absoluto. Estoy tocando mucho en directo y voy a sacar segundo disco, estoy muy a gusto conmigo mismo. Y más ilusionada que nunca en estos últimos tres años.

Belén Arjona, que la tienes al lado, sacó disco en 2003 en pleno huracán de OT. Aunque se hizo popular en su momento, quizás fue opacada por Operación Triunfo, y a pesar de todo sigue ahí. Ahora con el tiempo, ¿piensas en aquello de "ojalá no hubiera tocado en OT y haber seguido tirando"?

No reniego de eso, no lo hago. No me arrepiento, si es la pregunta. Aunque sea OT y haya muchas ideas ahí que no comparto, y que no me caso (aunque me casé en su momento), fue la plataforma para que mucha gente me conociera, de que mucha gente escuchara una música que no estaba escuchando, mi billete para llenar salas de conciertos que no llenaba hasta entonces. No me arrepiento ni reniego jamás. Hay muchas cosas de las que no estoy de acuerdo, y que acepté en su momento. Pero gracias a ese programa contacté con público con el que era imposible contactar, tenía 25 años y 3 euros en el bolsillo, y estaba loca por cantar pero no tenía a nadie que me tendiera la mano.


Internet y las redes sociales nos han permitido a todos escuchar mucha música, como decías música que no estábamos acostumbrados a escuchar. También un contacto más cercano con el artista. Pero el hecho de poder escuchar más música repercute en que le dedicamos menos tiempo a cada uno de esos artistas. ¿No da miedo el pensar que ahora escuchan tu disco pero que en cuanto salga otro nuevo en dos días ya no te escucharán?


Bueno, no me da miedo, no las redes sociales. Siempre ha dado miedo la competencia. Miedo quizás no, pero siempre ha estado ahí. Me da más miedo la descarga ilegal, que se siga practicando. Aún así te digo que tiene sus cosas buenas, porque tal vez es gente que no tendría acceso a tu música si no fuera ilegalmente, y luego tampoco vendría a tus conciertos. Todo tiene sus matices, especialmente las redes sociales no me asustan.


¿Cómo lo solucionamos tras el fracaso de la Ley Sinde en el Congreso? Seguro que todos debéis estar hablando qué se puede hacer.


Sí, sinceramente mantengo la esperanza que se vuelva a plantear nuevas modificaciones a la ley. Y que se llegue a un acuerdo, porque si en otros países se ha hecho no debe ser tan difícil. Tú no trabajas gratis, nadie trabaja gratis. Gran parte de los ingresos de los músicos que componemos proviene de los derechos de autor, de nuestros derechos de intérprete, y con las descargas ilegales no es viable. Aún y con la crisis llenamos los conciertos, pero no es suficiente. La crisis no ayuda. Nos están quitando el 50% por la cara, y el argumento mayoritario - de los piratas - es "las discográficas se lo llevan todo". ¿Tú has visto mi contrato? La gente habla sin saber, es muy fácil hablar pero no se conoce lo que están diciendo. Con todo mi cariño se habla desde la ignorancia, y siempre será fácil si se usan excusas para no pagar algo. Si fueran ellos los que fueran a trabajar sin cobrar, dirían pues no. Obviamente no dejaré de componer porque lo necesito, pero tiene muchos matices esta historia. 


Es difícil comprender que ser músico, ser artista, es un trabajo.


Para mi en primera instancia es una necesidad, lo hago desde que soy una niña, pero cuando eso se materializa, lo grabas, haces un contrato... se confirma que es un trabajo, y no puede ser gratis. Por ejemplo no me parecen caros los libros de hoy en día, y el autor ha estado dos años escribiéndolo y pateándose editoriales para que tengas el libro en la mano. No es caro. Quizás la gente no sabe lo que se invierte a nivel creativo, las horas que has echado para hacerlo redondo. Implican muchas cosas con muchos matices que la gente desconoce.


¿Spotify es la solución?


Para mi sí, tú puedes escuchar música gratis y luego podrás comprarla o no. Pero puedes escucharla. Si no quieres gastarte dinero, ve a Spotify. Yo lo hago, no me compro toda la música que escucho porque no puedo. 


Pero tampoco los artistas sacáis mucha tajada de lo que se escucha en Spotify.


No, no, pero tampoco se lo podrán descargar y meterlo en el iPod. Por descargartelo y meterlo en tu iPod, deberías pagar. Es tiempo y trabajo de mucha gente que la gente no sabe o no quiere ser consciente. Luego la gente te dice que te está haciendo un favor, que si descarga tu disco luego comprará una entrada para el concierto. ¿Y yo como lo sé? Son argumentos muy flacos, y lo digo con todo el cariño del mundo. Me estoy metiendo en un terreno que quizás mañana me pongan verde por todos los lados. Pero es lo que pienso, no me parece justo. La solución son sitios como Spotify, para escucharlo todo de manera gratuito. Y las descargas no son caras, es muy barato diez euros para iTunes. Que no lo quieres comprar en formato físico en El Corte Inglés, vale, hazlo en sitios como iTunes. Pero es que eso es un trabajo, nadie trabaja gratis. Te pagan poco si eres becario, pero te pagan.


Bueno, está la cosa muy mal.


Es un arte, y hay que valorarlo.


Pero en definitiva, el concierto en la sala Sidecar está lleno. 


Lleno del todo, no, quedan entradas todavía. Así que animo a todos a que vayan, porque Belén Arjona es muy especial, Rebeca Jiménez también lo es, y yo no hablo por mi... pero nos lo vamos a pasar muy bien.


Y os dejamos con este vídeo del concierto de anoche en Sidecar. Una versión de Creep de Radiohead de la mano de las tres artistas del show: Belén Arjona, Virginia Maestro y Rebeca Jiménez. Lo hemos encontrado en la página de Facebook del ciclo Vivas, donde encontraréis más información sobre los conciertos que se van organizando bajo este nombre y por todo el país.



8 comentarios:

  1. Por ahora me parecen malísmas entrevistas...
    Estaré a la espera de ver la continuación.

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Se confirma entonces: Virginia Labuat. Detesto la falta de sinceridad de Virginia cuando se atribuye decisiones ajenas. Supongo que en el fondo sabe que esa pegatina que lleva en la espalda no se la quitará mientras siga vinculada al nombre que le dio Mejide (un lastre todavía peor que la marca OT). Ha peleado, sí, y sólo ha conseguido que le dejen meter 3 canciones en inglés. Ha luchado por salir como Virginia Maestro hasta el final, sí, y aun así la han ignorado... Y después de todos sus esfuerzos, nos espera un buen disco de canciones TRADUCIDAS. Esto sólo demuestra como las majors siguen pisoteando sin piedad la creatividad de los artistas. El problema es que entre toda la bazofia de Sony Music Spain hay artistas como Virginia Maestro, que deberían poder crear sin imposiciones. La industria musical es una mierda... y el otro día me enteré de que Russian Red ha fichado por Sony, pobre chica.

    En fin... me quedo con la entrevista a Belén Arjona.

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  4. Max, ¡gracias por irnos leyendo!
    Un placer.

    Anónimo, lamento que no te gusten las entrevistas. Lo hago, sinceramente, lo mejor qué sé o que está en mi mano. Sí es cierto que tal vez la entrevista a Belén y a Virginia no fue tal y como esperaba, quizás nos metimos en terrenos pantanosos muy hablados y discutidos ya.

    Pero espero que en cuanto saquen nuevo disco (y será pronto en ambos casos) las tengamos de nuevo, y que la próxima vez te guste más lo que hagamos.

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  5. Anónimo-2
    La entrevista está bien. Cuando Viky saque el disco habrá más cosas que preguntarle. Gracias a esta entrevista, sabemos con que nombre va a salir. Gracias.

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  6. Estamos de acuerdo en que crear sin imposiciones debería ser lo normal, y afortunadamente cada vez más es así. Como dice Belén en la entrevista, "arriesgarse ahora no es ningún riesgo", así que a intentar hacer lo que a uno le apetece, es lo que toca.

    Y Virginia seguro saldrá adelante a pesar de las imposiciones. Y ha batallado lo suyo, seguro, para hacerse valer a ella y a sus opiniones.

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  7. Una buena entrevista, aunque tienes razón que quizás se han vuelto a tratar temas pantanosos, tanta pregunta sobre Telecinco, OT y Risto eclipsa lo verdaderamente importante, no obstante son interesantes las aportaciones que ha hecho sobre el negocio musical del cual desconocemos tantisimas cosas. Esperaremos a "Dulce Hogar".

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  8. Virginia Labuat.........sin duda que al que se le haya ocurrido el nombre se habrá quedado calvo de tanto pensar.

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